Con la reciente huelga que han secundado los LAJ (Letrados de la Administración de Justicia), (antiguos Secretarios Judiciales), parece que en la Administración de Justicia se están removiendo carencias que venían de tiempo atrás.
Los LAJS son funcionarios protegidos por el derecho de huelga, pero ¿Qué pasa con los abogados? ¿Y en concreto con los abogados del turno de oficio?
Ser abogado del turno de oficio no es sinónimo de ser un abogado incompetente, con mala fama, que en parte le han atribuido algunas series americanas, animados por el populacho cuando se imaginan al abogado de oficio como alguien sin experiencia y que «pasa» de sus clientes.
Cuantas veces hemos oído: No quiero abogado de oficio, prefiero de pago, no me fio del abogado de oficio, entre otras lindezas, todo ello con total desconocimiento que la mayoría de abogados que somos de pago también lo somos de oficio.
Y ello sin contar con la desconsideración, desprecio, frialdad de trato, distancia gélida, impertinencia, incluso rozando a humillaciones que por parte de algunos de los miembros de la judicatura, fiscalía y demás funcionariado de la Administración de Justicia soportamos no sólo los abogados de oficio sino cualquier abogado sea privado o de oficio.
Me considero no solo abogada privada sino también del turno de oficio, y lo digo con mucho orgullo, porque para que todo el mundo sepa, el abogado de oficio en España es un profesional que tras terminar la licenciatura o grado en Derecho, al menos tiene que llevar 3 años ejerciendo y superar un examen, master, o en años anteriores haber superado el examen de la Escuela de Práctica jurídica
Además, el sistema español de Justicia Gratuita está considerado como uno de los mejores del mundo y cuenta con un alto nivel de satisfacción por parte de los usuarios, con una media de profesionales con 15 años de experiencia, que se implican al cien por cien en sus casos.
Entonces ¿Porqué no cuidamos y respetamos al abogado de oficio, clave en nuestro sistema de justicia? Porque sin abogados de oficio no se podría hacer efectivo el derecho de defensa que garantiza nuestra Constitución y sólo los ciudadanos que pudieran pagar un abogado podrían defenderse, es decir los menos favorecidos económicamente quedarían fuera, desprotegidos, algo impensable en nuestro Estado de Derecho.
Reivindicaciones del turno de oficio
Entonces, ¿cuales serían las reivindicaciones básicas del turno de oficio?. Por enumerar algunas sin ser taxativos:
Y así podríamos estar enumerando y enumerando…las condiciones en que se trabaja en el turno de oficio son lamentables, por lo que no sería de extrañar que desde el turno de oficio se pudiera plantear paros, concentraciones e incluso huelga porque como sabemos desgraciadamente ”los derechos no se conceden sino que se conquistan”, y sino, que se lo digan a los trabajadores del siglo pasado que con su lucha obrera consiguieron muchos de los derechos que hoy tienen.
Un comentario
MUCHAS GRACIAS COMPAÑERA POR TU AYUDA ¡¡¡¡